La edad biológica, la edad cronológica y el riesgo de cáncer

August 7, 2024
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Con cada vuelta al sol, celebramos y seguimos sumando años a nuestra vida. Pero, ¿sabías que tu cuerpo puede tener una edad diferente a tus años calendario? La edad cronológica es la que conocemos, la que comenzamos a contar desde que nacemos. La edad biológica, por otro lado, es aquella que se refleja en la salud de nuestro organismo. No todos envejecemos al mismo ritmo, ni cuidamos de nuestro bienestar de la misma manera. Nuestra edad biológica es determinada por un número de pruebas y puede verse afectada por la genética, el estilo de vida, los patrones de sueño, el estrés, condiciones médicas, entre otros factores.

Recientemente la incidencia de ciertos tipos de cáncer en personas jóvenes ha levantado bandera sobre la posible correlación entre la edad biológica de estos pacientes diagnosticados. La edad siempre ha sido un factor de riesgo para el desarrollo de diversos tipos de cáncer. Es por esto que la mamografía se recomienda a partir de los 35 años, el exámen de próstata a partir de los 40, etc.

En un estudio llevado a cabo en la Universidad de Washington, se evaluaron nueve biomarcadores presentes en nuestras células que influyen en el envejecimiento y su relación con el diagnóstico de ciertos tipo de cáncer. En resumen, lo que encontraron es que sí existe una relación; mientras más alta la edad biológica, más probabilidad del desarrollo de cáncer. Estos fueron los resultados de la incidencia por tipo de cáncer:

  • 42% más propenso a desarrollar cáncer de pulmón
  • 22% más propenso a desarrollar cáncer gastrointestinal
  • 36% más propenso a desarrollar cáncer de útero

Este hallazgo ayuda a poder entender la importancia de la edad biológica al momento de evaluar a un paciente y poder recomendar pruebas preventivas que vayan de acuerdo a este envejecimiento, no importa su edad cronológica.

Aunque conocer nuestra edad biológica requiere de pruebas especializadas, hay acciones diarias que podemos tomar para tratar de mantenerla a la par con nuestra edad cronológica o incluso, bajarla. Sí, es posible tomar acción inmediata. Por ejemplo, una persona de 50 años que no hace ejercicio, tiene malos hábitos alimenticios, es fumadora y consume alcohol frecuentemente, podría emostrar una edad biológica de 58. Haciendo unos ajustes a su estilo de vida podría reflejar una edad biológica reducida en un periodo de un año.

A continuación te decimos los factores más importantes para lograr mantener una edad biológica cónsona con nuestra edad cronológica, o incluso revertirla.

  1. Ejercicio: En términos de actividad física, tendemos a verlo como algo opcional en la vida y debemos entender que la misma es necesaria para el funcionamiento óptimo de nuestro cuerpo. Una persona sedentaria no sabe el potencial de su cerebro, ya que sin la actividad física, no hay la reacción química que sucede con la energía generada. Además, una persona que hace ejercicio puede llegar a alargar su vida de 8 a 10 años y puede llegar a mejorar la calidad de vida de 15 a 25 años.
  2. Nutrición: No es casualidad que existe el dicho “eres lo que comes”. Mientras más sea nuestra comida de fuentes integrales, mejor será nuestra salud. Cuando se suele hablar de comida “real”, se refiere a esto precisamente —alimentos integrales, sin procesar o menos procesados, condimentados y/o saturados. Las frutas y las verduras continúan siendo los alimentos más nutritivos para nuestro cuerpo, además de que siempre debemos tener en cuenta la importancia de la hidratación. Nuestro cuerpo está compuesto mayormente de agua; suplementarlo adecuadamente es necesario para el funcionamiento correcto de nuestro sistema. El consumo de alcohol es perjudicial porque puede afectar la hidratación de nuestro cuerpo. Consumirlo con moderación es crucial para evitar que afecte la salud.
  3. Evita el tabaco: Múltiples estudios han demostrado que el consumo del tabacco inhalado y de mascar está vinculado con el desarrollo de diversos tipo de cáncer incluyendo de pulmón, de la garganta, de la laringe y del riñón, entre otros. El humo de segunda mano también ha demostrado tener resultados adversos en los pacientes. Se recomienda dejar de utilizar estos productos y mantenerse alejado de personas que lo estén consumiendo.
  4. Evaluaciones rutinarias: La prevención continúa siendo el mejor aliado de la salud. Un diagnóstico temprano puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte.

 

Nunca es tarde para hacer un cambio en nuestra vida, especialmente si puede significar una mejor calidad de vida. El ejercicio y la nutrición son acciones que podemos modificar todos los días, con decisiones que ayudan a nutrir nuestro cuerpo y a mejorar nuestra movilidad y función. Las visitas de rutina al médico de cabecera deben llevarse a cabo de manera anual. En ellas, discute con tu médico tu estilo de vida actual y posibles factores de riesgo que puedas tener para asegurarte que te puedan hacer las pruebas de cernimiento adecuadas.